Estaba yo empezando a escribir un correo electrónico introductorio a los blogs, cuando, pensando en sus contenidos, me dí cuenta que el mejor ejemplo era no escribir el correo sino una entrada en mi blog. Pero como mi blog es menos concurrido que rabadilla! y esto puede interesar a algún navegante de esos que llegan aquí buscando cosas extrañas, pues lo he trasladado a este... ¿conjunto de textos publicados en forma de blog? Y dado que lo podemos hacer más divertido con nuestra habitual falta de seriedad, disfrutémoslo.
El primer paso para adentrarse en el mundo de los blogs, es saber hablar bien de ellos. Cuando comentemos en público cosas sobre algún blog, debemos tener el reflejo imprescindible de ladear en un golpe despectivo la cabeza a la vez que intentamos que la palabra suene lo más estomacal posible. Lo cual, por aquello del ladeo de jeta, se podría sustituir por la cursiva/itálica tratándose de texto. Es algo fundamental si queremos conseguir que el blog nos otorgue los méritos sociales que nos corresponden.
El estátus que nos otorga un blog se debe a que no es un "Mi Diario". Bueno, en realidad, podría serlo, pero para ello recurriremos a sistemas en los que se restingra el acceso a nuestra familia, que ya nos tiene bien catalogados. El blog público es más una bitácora que un diario, por ello debemos alegranos de que esta sea la traducción más común del término a nuestro casto español. Debemos pensar en aquella famosa serie que empezaba por un profundo: "Cuaderno de Bitácoras...". Este espíritu, es el que forja un buen blog.
La bitácora no recoge los acontecimientos de forma simple, se encarga de realzar su aspecto trágico al destilar el hecho del momento. Por muy indiferente que una acción pueda ser, su plasmación en el blog ha de suponer el paso a una dimensión trágica, la de separarse de su autor. Esto supone, como los grandes cuadros, que ya no se podrá repetir. Tanto es así, que en uno de los blogs patrios más visitados nos encontramos un aviso sobre qué película va a ver esta noche su autor. ¿A quién coño le puede importar que alguien vaya a ver una película una noche? ¡A nadie! Lo importante es que esa película ha sido vista, y, que perdido en un servidor, el acto trágico de escogerla no desaparecerá. En esta supervivencia del acto más allá de su momento, se forjará entonces el mito, de la selección de una cierta película; y ese mito podrá suponer la movilización de otro agente hacia el visionado de la misma. No es mi caso porque yo ya la había visto y lo que buscaba era información adicional, pero a alguien le puede impulsar a verla. Tiene por ello, la bitácora, la grandeza de descubrir la magnificencia de nuestros actos.
El autor de la bitácora podría considerarse un héroe. Se dice que la Historia la escriben los vencedores, frente a esto, los blogs ponen la Historia en manos de los héroes. Cierto es que toda la información que hoy se aloja en servidores se puede perder. Tal vez, en dos mil años, nuestras ruinas, trozos de silicio y metal, sean un galimatías incomprensible. Pero por otro lado, toda la información que la red maneja es energía "conducida". Dada nuestra deficiencia tecnológica, siempre se nos escapa energía, con lo que no es del todo imposible que nuestros heróicos actos en su difusión por la red también sean emitidos al universo y que este los guarde en su Eco, en su Misterio. Escribir una bitácora se supone que implica escoger pequeños detalles y transmitirlos; pero tal vez, simplemente sea ampliar el eco de nuestras acciones trasladándolo más allá de los presentes. El blog tiene un poder muy serio en cuanto otorga infinitas voces. Así se aumenta la posibilidad de que la Humanidad hable, azarosamente, de una forma comprensible. Bloguear, es aceptar que uno no tiene su propio relato en el bolsillo y aceptar el heroico acto de expresarse para que nadie te escuche.
Resumiendo. Que cualquiera pueda tener un blog, principalmente gracias a dos aspectos mercantiles:
El negocio de internet tiene dos caras, una es aportar contenidos, ofrecer (la oferta); otra es ordenar los contenidos, seleccionar (la demanda). Es por esto que el negocio de los buscadores es muy importante, porque ellos son el filtro de la demanda. Buscando que su filtro sea lo más 'humano' posible, y así atraer a esos 'humanoides' que clican sobre el botón de búsqueda, una de las teorías trinfadoras fue el PageRank. Pero este necesita alimentarse de humanos produciendo y escogiendo contenidos en la web. Las simples anotaciones con enlaces a puntos que le interesan o sus intentos de informar sobre algo que a otros 'humanoides' debería interesar. Como los blogs tienen el espíritu de ser la bitácora en la que el navegante apunta los puertos/enlaces de interés por los que ha pasado y las aventuras sufridas en ellos o en la vida real. Los buscadores toman de ellos las preferencias que tienen los 'humanoides' decorada con información humanoide.
A la hora de aportar contenidos, no bastan con pequeñas anotaciones, se necesitán páginas centralizadoras y controlables con publicidad. Es difícil adivinar qué puede atraer a mucho público. Por ello, dando voz a muchos atolondrados, puedes lograr toparte con que unos se hacen famosos. De tal modo, un blog puede darte de comer si consigues tener un número suficiente de visitas diarias, aunque lo puede convertir en otra cosa que no es un blog.
El resultado de estos factores es que cualquiera puede tener un blog. Y si nos gusta escribir, pues debemos aprovechar la situación para logar que en la red haya contenidos para todos, de tal modo que haya vías de comunicación alternativas a los medios de masas. Poder enterarnos de curiosidades como la caza de brujas que parece haber contra Jorge Cortell ó estar al tanto de los nuevos gadgets. El bloguear es un deber, en cierta medida, de aquel que tiene tiempo de hacerlo.
Sobre sitios donde alojar gratuítamente blogs; no seré tan capullo como para hacer propaganda más allá de los que me dan servicio: Blogger y LiveJournal. Aunque no me haré responsable de los posibles comentarios que se puedan realizar.
PS-¿Alguien ha remarcado que esta entrada tiene dos bloques? ¿Realmente los tiene?
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